Pese a haber pasado apuros con su puntería el sábado en Indianápolis, Mark Sánchez perseveró para sobrevivir y vencer. Y ahora, dice él, su hombro derecho ha mejorado camino al tercer encuentro del año contra los Patriots.
"Honestamente, me siento mejor de lo que me he sentido en tres o cuatro semanas", afirmó Sánchez el miércoles. "Por primera vez en buen tiempo tomé parte en un entrenamiento completo y eso fue enorme. Sabemos que estoy mejorando y eso es lo más importante".
Contra los Colts, Sánchez se vio mejor en la segunda mitad, completando nueve de sus 12 tiros cuando los Jets marcaron sus 17 puntos. Le dio vuelta a una pésima primera mitad en la cual frecuentemente falló con tiros elevados, completando nueve de 19 y terminando la mitad con un lanzamiento interceptado en la línea de gol.
"Estaba tirando sin la puntería debida y no quería dejar de ninguna manera que las cosas se desplomaran", dijo. "Solo quería regresar al campo de juego y completar mis lanzamientos, ser inteligente, cuidar el balón, no tomar más decisiones estúpidas, especialmente en la zona roja, dejar que el juego de corredores nos ayudara, completar mis tiros y construir sobre esa base. Y cuando fuese necesario, hacer una jugada. A veces tienes que hacer una jugada".
Sánchez hizo justo lo suficiente en la última marcha, completando tres disparos para 38 yardas. Puso a Nick Folk en posición para ganar con un gol de campo de 32 yardas en los últimos segundos. Pero ayudará mucho más esta semana si Sánchez arranca bien desde el primer minuto en el estadio Gillette.
Cuando los Pats aplastaron a los Jets por 45-3 en el partido de vuelta el 6 de diciembre, Sánchez completó tan solo ocho de sus 18 lanzamientos para 77 yardas, aportando al colapso verdiblanco en la primera mitad, una que perdieron por 24-3.
"Fue la tormenta perfecta. Jugamos muy mal. Arrancamos mal y ellos muy bien", dijo. "Y nos arrollaron. Nunca encontramos una respuesta. Básicamente, así sucedió".
Sánchez sufrió tres tiros interceptados en la segunda mitad y los Jets nunca pudieron cerrar la brecha. Cualquier oportunidad para recuperar el partido se esfumó en la primera posesión del tercer cuarto, cuando el novato apoyador interior Brandon Spikes cortó un pase dirigido a Braylon Edwards en la zona roja.
"Cuando estás perdiendo un partido de esa manera, comienzas a forzar tiros por el centro del campo, a lanzar balones interceptados, y al final te matan", dijo Sánchez. "Así es como ellos ganan. Es lo que hacen. Se aprovechan de tus errores. No puedes equivocarte contra ellos y así es que tendremos que jugar el domingo".
Aunque Sánchez tiene marca de 2-2 contra los Patriots en partidos de Liga, aún no ha tenido un buen rendimiento en el estadio Gillette de Foxboro, Massachusetts. Tras dos visitas, suma siete tiros interceptados, ha completado apenas 46% de sus tiros y ha perdido ambos partidos por un promedio de 30 puntos.
Los Pats, que pasaron mucho tiempo esta temporada jugando al frente en el marcador, encabezaron a la NFL con 25 tiros interceptados. Pero los Jets no tienen que poner todo el peso de este partido sobre el hombro de Sánchez ahora que su juego de corredores ha encontrado nueva vida: sumaron 169 yardas contra los Colts y promediaron 144 yardas en sus dos encuentros contra Belichick y compañía.
"Pienso francamente que cuando jugamos nuestro mejor fútbol –y lo he dicho todo el año–, es cuando tenemos un ataque balanceado y nos nutrimos el uno al otro", dijo Sánchez. "Los tiros completos acompañan a las buenas rachas por tierra y las buenas rachas por tierra llegan acompañadas por los tiros completos. Me gusta tener un balance".
Parecido al fin de semana pasado ante Peyton Manning, Sánchez no se preocupará por Tom Brady el domingo. Ya suma más victorias de postemporada que cualquier otro mariscal en la historia de los Jets y ahora Sánchez tiene la mira puesta en una victoria ante los Pats y una segunda participación consecutiva en la final de conferencia.
"Si juegas al nivel que se supone que juegues, si te enfocas en la defensa, si completas tus lanzamientos y completas las jugadas cuando se presentan las oportunidades, inevitablemente, las cosas irán bien", dijo. "No hay una buena manera de seguir el juego de Tom. Ni vale la pena. No está preocupado sobre lo que hace el otro mariscal. Está preocupado de la defensa, no de mí".