Tras recibir aprobación preliminar de la National Football League, la futura casa de los New York Jets y los New York Giants ha comenzado una campaña a gran escala para ser la sede del Súper Bowl 2014, según anunció hoy el New Meadowlands Stadium Company.
El nuevo estadio, que abrirá sus puertas en la temporada 2010, recibió permiso del Super Bowl Advisory Committee, el comité asesor de los dueños de la NFL, para someter una solicitud. El comité dio su aprobación pese a que una de las condiciones tradicionales para los candidatos es que la región tenga temperaturas mínimas de 50 grados Fahrenheit (10 centígrados) o un estadio cubierto con clima controlado. Y se concedió el permiso bajo la condición de que sería una solicitud única basada en la oportunidad de celebrar la inauguración de un nuevo estadio junto con el enorme legado y la gran tradición de la NFL en el área de Nueva York.
Todas las solicitudes preliminares tendrán que ser sometidas a la NFL no más tarde del 1 de abril y la Liga seleccionará a un ganador a fines de mayo. Tres otras sedes han indicado que también piensan solicitar el Súper Bowl 2014.
El impacto económico de un Súper Bowl en la región de Nueva York y Nueva Jersey sería considerable. Además de generar cientos de millones de dólares en actividad económica, sería un enorme estímulo para la zona, creando cientos de empleos relacionados con la organización del partido y el alojamiento de los visitantes y espectadores. La solicitud disfruta del fuerte apoyo de los líderes políticos de Nueva York y Nueva Jersey, entre ellos Chris Christie, el gobernador electo de Nueva Jersey; Jon Corzine, el gobernador actual de Nueva Jersey; David Paterson, el gobernador de Nueva York, y Michael Bloomberg, el alcalde de la ciudad de Nueva York. El comité organizador será dirigido por Woody Johnson, presidente y director ejecutivo de los Jets, y Jonathan Tisch, copresidente de la Loews Corporation y tesorero de los Giants.
"Es hora de que el partido más importante en el fútbol americano se juegue en el escenario más grande del mundo", declararon Woody Johnson y Jonathan Tisch, los copresidentes del comité organizador. "Tenemos fe en que el atractivo y el prestigio de la zona metropolitana de Nueva York, combinados con la capacidad tecnológica innovadora de nuestro nuevo estadio, nos permita ofrecer una experiencia única y emocionante tanto a los equipos y sus aficionados como a la Liga entera y al deporte del fútbol americano. Y por supuesto, nos encantaría traer el Súper Bowl, y sus importantes beneficios económicos, a Nueva York y la zona norte de Nueva Jersey".
El nuevo estadio de los Meadowlands tendrá la distinción única de ser la primera cancha sede de dos equipos de la NFL. Por lo tanto, será el escenario de 20 partidos de Liga por temporada, más que cualquier otra cancha. También tendrá la distinción de ser el estadio más costoso financiado por fondos privados en la historia de Estados Unidos.
"La National Football League y nuestra organización tienen la dicha de disfrutar de una gran tradición en la zona metropolitana de Nueva York, y la nueva casa de los Giants y los Jets mantiene esa tradición", declaró John Mara, presidente y director ejecutivo de los New York Giants. "Si nuestro estadio es la sede del Súper Bowl en el 2014, nuestras organizaciones y esta región podrán rendirle honor a esta legado con el partido más importante de todos, y agradecemos la oportunidad de colaborar con nuestra comunidad para lograr este cometido".
"Si hay algo en que coinciden los aficionados del fútbol americano por todo el país, es que este deporte merece una final en el escenario más grande de todos", afirmó Woody Johnson. "Agradecemos que la NFL haya hecho nuestro estadio elegible y que este sueño que hemos anhelado por tanto tiempo esté un paso más cerca de la realidad".
"Aunque no terminaremos nuestro estadio por varios meses, la solicitud sienta un precedente de lo que veremos en el futuro", dijo Steve Tisch, presidente y vicepresidente ejecutivo de los New York Giants. "Nuestra lucha porque el estadio sea la sede del Súper Bowl XLVIII , es testimonio de nuestro compromiso de ser ejemplo de todo lo mejor".
Si Nueva York y Nueva Jersey se convierten en la sede, el Súper Bowl XLVIII se sumaría a una lista creciente de eventos nacionales e internacionales que se celebran en la zona metropolitana de Nueva York, entre ellos el Abierto de Estado Unidos (de tenis), el Belmont Stakes, el maratón de Nueva York, el torneo de baloncesto universitario de la NCAA, el Hambletonian, los premios Grammy y Tony, la parada Macy's del Día de Acción de Gracia y la fiesta de Año Viejo en Times Square.
El Súper Bowl sería también parte de una serie de eventos importantes pactados para el nuevo estadio de los Meadowlands, que incluyen dos anticipados partidos de fútbol americano universitario, Navy-Notre Dame y Army-Rutgers, más conciertos de los aclamados grupos de rock Bon Jovi y U2, quienes harán escala durante giras mundiales.
Una vez terminado, el nuevo estadio de los Meadowlands impondrá elevadas normas de calidad por su tecnología moderna, comodidad y servicios. Con capacidad para 82,500 espectadores, el nuevo estadio de los Meadowlands será el tercero más grande de la NFL. El estadio se destacará por cuatro enormes pizarras electrónicas de alta definición que miden 30 X 118 pies cada una y se han instalado en la parte alta de cada esquina del campo; por una pizarra eléctrica circular que le da la vuelta al interior de estadio y que mide 48 X 2,200 pies; por más de 2,100 monitores de alta definición instalados por todo el estadio, y por 20 torres o pantallas rectangulares de alta definición que miden desde 20 X 40 pies hasta 20 X 60 pies.
Fuera del estadio, una plaza de 350,000 pies cuadrados será el centro de un sinnúmero de actividades para los espectadores antes y durante el partido. Uno de los servicios más significativos del estadio será una nueva línea de ferrocarril que llevará a los espectadores directamente a la entrada del estadio.