Cuando no se cumplen con las expectativas en Nueva York, todo el mundo lo sabe. Se decía que [Plaxico Burress*estaba viejo y torpe. Que [Shonn Greene *no era un corredor protagonista. Que la defensa no era tan buena como se pensaba.
Todo cambió contra los San Diego Chargers el domingo en el estadio MetLife. Tras perder los primeros 30 minutos por 21-10, los Jets jugaron su mejor mitad de la campaña, remontando un déficit de 11 o más puntos por segunda vez esta temporada. Burress atajó tres tiros de touchdowns, Greene marcó más de 100 yardas por tierra por primera vez este año y la defensa verdiblanca blanqueó el potente ataque aéreo de los visitantes para ganar por 27-21.
Fue literalmente una historia de dos mitades. En la primera mitad, los Chargers, el equipo líder de la Liga en jugadas de tercer intento (56.5%), abrumó a los Jets, la defensa líder en las jugadas de tercer intento (28.6%). Encabezados por el mariscal Philip Rivers, los Chargers convirtieron seis de siete jugadas de tercer intento y marcaron 21 puntos. Rivers tuvo todo el tiempo del mundo para lanzar, completando ocho de 12 tiros para 92 yardas y un touchdown.
En la segunda mitad, los Chargers convirtieron solo una de siete jugadas de tercer intento y nunca llegaron a la zona de anotaciones. Rivers, hostigado por la presión incesante de los Jets, completó apenas 8 de 20 pases para 87 yardas y lanzó dos tiros interceptados en el cuarto tiempo, jugadas claves en el resurgimiento neoyorquino.
"Sabíamos sus tendencias ofensivas", dijo el esquinero [Antonio Cromartie* *. "Estábamos decepcionados por la manera que jugamos en la primera mitad. Pensamos que con un poco de presión, Philip se movería fuera del bolsillo de protección, donde no tira con la misma precisión".
"Hay que jugar con mayor urgencia en tercer intento", agregó el esquinero [Kyle Wilson , quien interceptó el primer balón de su carrera. "Nos sentimos muy orgullosos de eso. Y fue lo que hicimos en la segunda mitad".
El corte de Wilson ayudó a sellar el remonte de los Jets porque sucedió en un momento crítico. Los Jets acababan de tomar la ventaja por primera vez, por 24-21 tras el tercer touchdown de Burress, y los Chargers estaban al ataque, intentando ingresar a territorio verdiblanco. En una jugada de tercero y 6 en la yarda 41 de San Diego, Rivers disparó un pase largo al centro, buscando al ala Vincent Jackson. Wilson leyó la jugada y cortó el balón limpiamente.
"Era cuestión de hacer mi trabajo", dijo Wilson, un jugador de segundo año. "Se suponía que estuviera en frente del receptor. Un jugador ofensivo se fue en movimiento antes del inicio de jugada, nos comunicamos entre nosotros sobre la marca defensiva e hicimos todo lo que debíamos hacer. Dale crédito [al coordinador defensivo]Mike Pettine. Yo sencillamente cumplí con mi trabajo".
Irónicamente, antes del partido el esquinero [Darrelle Revis* *había vacilado a Wilson sobre su falta de tiros interceptados.
"Le pregunté, '¿Cuándo vas a interceptar un balón?' Me dijo que pronto. Estoy orgulloso de él por elevar su juego y estoy seguro de que continuará haciendo jugadas", dijo Revis.
Por supuesto, nadie ha hecho más jugadas grandes en los primeros siete partidos de los Jets que Revis. Fue el autor del primer tiro interceptado de los Jets, llevando el balón 64 yardas a la 19 de San Diego, donde cinco jugadas más tarde Mark Sánchezencontró a Burress con un tiro de tres yardas para poner arriba a los Jets por 24-21 restando 8:41.
Revis encabeza a los Jets con 4 tiros interceptados, incluyendo tres en los últimos dos encuentros. Suma 18 en cinco años en la Liga, y nueve de ellos han sido en el último cuarto del partido.
"A veces sales a jugar y el balón bota en tu dirección", dijo Revis. "Es parte del juego. Hay que siempre fajarse y seguir trabajando para poder hacer las jugadas".
Se puede decir lo mismo de Burress, que después de confesar la semana pasada que todavía no se entendía con Sánchez en el campo de juego, le sacó máximo provecho a sus cuatros recepciones. Sumaron para solo 25 yardas, pero valieron para tres touchdowns.
Es verdad que los Jets han tenido problemas manteniendo vivas las marchas. Sin embargo, cuando llegan a la zona roja del rival, dentro de la yarda 20, son uno de los equipos más letales de la Liga. La diferencia el domingo fue que Sánchez buscó con frecuencia a Burress, una ala de 6 pies 5 pulgadas, aun cuando los errores mentales y las faltas personales habían puesto a los Jets abajo por 14-3 en el segundo cuarto.
Ayudó el hecho de que Burress tiene cuatro pulgadas más que el esquinero Antoine Cason, pero posiblemente ni siquiera con una escoba Cason hubiese ganado los duelos. El primer touchdown fue un pase de 3 yardas en una jugada de tercero y gol que puso el marcador por 14-10 restando 7:18 en la primera mitad. El segundo tiro anotador fue de cuatro yardas en segundo y gol que puso el marcador por 21-17 restando 2:57 en el tercer cuarto. Y el tercero, que le dio la ventaja a los Jets por primera vez, fue un balazo al fondo de la zona en tercero y gol.
"Plaxico estaba al rojo vivo", dijo Sánchez. "Creo que no hubiese importado quien estuviese defendiéndolo. Estaba imparable. Hay que alimentar a tus estrellas cuando agarran impulso y fue exactamente lo que hicimos".
"Era cuestión de ser paciente. Santonio [Holmes] no dejaba de decirme, 'No pierdas la paciencia'. [Brian Schottenheimer] nunca perdió fe en mí y siguió cantando las jugadas para mí", dijo Burress. "Estaba trabajando duro en los entrenamientos y viendo buenos resultados, así que sabía que llegaría el día en que todo iba a cuajar. Y hoy sencillamente tuvimos un gran día".
Los Jets han ganado dos partidos seguidos y tienen ahora marca de 4-3, incluyendo un registro perfecto de 4-0 en el estadio MetLife. Les toca una semana libre, y después vendrá un trecho difícil de tres encuentros en 11 días en Buffalo contra los Bills, en casa contra los Patriots y en Denver ante los Broncos. Por eso fue importante vencer a los Chargers y recuperar tanto la confianza como una marca ganadora.
"Es algo grande", dijo Revis. "Nunca quieres llegar a la semana libre tras perder un partido. Ahora podemos disfrutar del tiempo libre, examinar lo bueno y lo malo de nuestro juego, prepararnos para el resto de la temporada y continuar la campaña".