En una temporada que se destacó por los remontes espectaculares, a los Jets les faltó uno más. Mientras que se levantaron de la lona tras una horrible primera mitad en el Heinz Field de Pittsburgh el domingo por la noche, como dijo el técnico Rex Ryan, volvieron a "quedarse cortos" en una final de la conferencia Americana, esta vez ante los Steelers por 24-19.
Fue una derrota que puso fin a una temporada que comenzó con grandes expectativas, y aunque los Jets no lograron su sueño de jugar en el Súper Bowl 45 en Dallas, pueden consolarse con el hecho de que se clasificaron para la final de conferencia por segundo año consecutivo y ahora forman parte de la élite de la NFL. Ya no son los Jets de antes, sino un equipo con las aspiraciones de un campeón.
"Les tengo una noticia", dijo Ryan en su rueda de prensa después del partido. "Nuestro objetivo para el año próximo no cambia, y nunca cambiará. Vamos a buscar el Súper Bowl, y lo vamos a buscar hasta que lo consigamos, y lo vamos a buscar otra vez después de que lo ganemos".
Fue un partido con dos partes totalmente opuestas. Los Steelers se fueron arriba 24-0, a punto de noquear a los Jets después de que el esquinero Ike Taylor derribó al mariscal Mark Sánchez por su lado ciego y William Gay recuperó un balón suelto para un touchdown de 19 yardas restando 1:13 en el segundo cuarto.
Pero Nueva York cerró la primera mitad con un gol de campo, y terminó marcando los últimos 19 puntos del partido. La defensa, que tan mal lució en los primeros 29 minutos, hizo los ajustes necesarios en el medio tiempo y hostigó al mariscal Ben Roethlisberger sin cesar, marcando dos capturas y dos tiros interceptados. Sánchez también se creció. Abrió la segunda mitad con una marcha anotadora de cinco jugadas y 90 yardas que culminó con un balazo de 45 yardas a Santonio Holmes. Y en el cuarto tiempo, conectó con Jerricho Cotchery para un touchdown de cuatro yardas que puso a su equipo a cinco puntos del empate.
Los Jets flaquearon al final, cuando los Steelers retomaron posesión tras la anotación de Cotchery restando 3:06 por jugar, y Roethlisberger usó sus piernas en dos ocasiones para extender la jugada y completar un lanzamiento para un primero y 10, dejando a Nueva York sin tiempos muertos y más esperanzas.
"Sencillamente no jugamos con pasión al inicio", declaró el tackle defensivo Mike DeVito. "Fallamos demasiadas paradas. Estuvimos lentos. La defensa jugó con mucha más pasión en la segunda mitad. Pero éstos son los partidos que hay que jugar completos para ganar. No vale jugar una mitad. Tiene que ser un partido completo, y no lo hicimos".
Los Steelers impusieron la pauta con la primera marcha del partido, una de 15 jugadas que sumó 66 yardas y tomó 9:06, la serie anotadora más larga por tiempo de la temporada contra los Jets. El corredor Rashard Mendenhall pareció un torito indomable, rebasando y arrollando a los defensas verdiblancos en acarreo tras acarreo. Mendenhall sumó 99 yardas contra los Jets en la semana 15, encuentro que los Jets ganaron por 22-17. El domingo marcó 95 en la primera mitad y 121 en el partido.
"Es la derrota más dolorosa que he sufrido", confesó el ala defensiva, [Jason Taylor. "Jugamos tan mal en la primera mitad. Mientras que Mendenhall es un corredor de categoría, lo hicimos lucir mejor. En la final de la conferencia Americana, no puedes jugar solo 30 minutos. Vas a perder".
Fue un resultado duro para Taylor y veteranos como [LaDainian Tomlinson y [Shaun Ellis que tampoco nunca han jugado en el Súper Bowl. Tan cerca y tan lejos. Quizá los esfuerzos de las dos semanas previas, cuando vencieron a Peyton Manning en Indianápolis y a Tom Brady en Foxboro, agotaron a los Jets más de lo que se imaginaron. Tumbaron a dos de los mejores mariscales de la Liga, y perdieron contra otro que ya ha ganado dos Súper Bowls y se prepara para su tercero en seis años. Los Jets, por ser el sexto de serie de la conferencia, tenían un hueso demasiado duro de roer.
Cuando tengan tiempo de recapacitar, podrán apreciar que celebraron una de las mejores campañas en la historia del equipo. Terminaron con una marca global de 13-6, igualando el récord de club para el mayor número de victorias en un año. Y se convirtieron en los primeros en sumar cuatro victorias de postemporada fuera de casa en dos años consecutivos.
Mientras tanto, Sánchez continuó con su desarrollo y maduración, confirmando que los Jets ficharon al jugador indicado con la quinta selección del sorteo de hace dos veranos. Fue mejor que Roethlisberger, que completó apenas 10 de 19 tiros para 133 yardas. Sánchez completó 20 de 33 para 233 yardas y dos touchdowns. De hecho, como el año pasado, Sánchez jugó mejor durante la postemporada. Contra los Colts, los Patriots y los Steelers, tres grandes equipos, completó 54 de 89 lanzamientos (61%) para 616 yardas, cinco touchdowns y un tiro interceptado.
"Arrancaron con fuerza y tomaron control del partido", dijo Sánchez. "Me decía a mí mismo: 'Aguanta'. Definitivamente jugamos con el esfuerzo necesario en la segunda mitad. Sencillamente no lo hicimos en la primera mitad".
"Jugamos una buena mitad, pero no un buen partido", agregó Ryan. "Tienes que darle crédito a Pittsburgh. Es un muy buen equipo, y si tienes intenciones de ganarle, más vale que juegues cuatro periodos completos, y no lo hicimos hoy. Pensé que ganaríamos; fue la primera vez que nuestra defensa no respondió en una situación como ésa y no pudieron frenar al rival para darle a nuestra ofensiva la oportunidad de ganar el partido. Quiero decir que estoy orgulloso de mi equipo. Creo que no hay muchos que hubiesen superado lo que superamos para llegar aquí y casi ganar otro partido al final".
Notas del partido
El apoyador Bryan Thomas interceptó un tiro de Roethlisberger temprano en el segundo cuarto, el primero de su carrera en nueve temporadas y 152 partidos… Con su touchdown de 45 yardas, Holmes es el primer jugador con anotaciones en una final de conferencia para dos equipos distintos. Marcó un touchdown para los Steelers el 2008 contra los Ravens…
Los Steelers aplastaron a los Jets en la primera mitad tanto en puntos como en yardas, 231 a 50. La diferencia por tierra fue aún mayor, 135 a 1. La última vez que los Jets sumaron 1 yarda por tierra en la primera mitad fue en el 2000 contra Oakland. Una de las ironías del partido es que los Jets, gracias a su resurgimiento en la segunda mitad, terminaron con más yardas que los Steelers, 289 a 287.