¿Qué piensas de la posibilidad de ser el segundo jugador latino en ganar un Súper Bowl?
Francamente, estoy enfocado en el partido. No sé cuántos jugadores latinos o mexicano-estadounidenses han ganado la final de la conferencia Americana, pero espero ser el próximo. Es un honor representar a esa comunidad y significa mucho ser una inspiración para ella. No me da más presión. Creo que le inyecta más alegría y emoción a todo lo que está sucediendo, así que para mí es divertido.
¿Cómo ha cambiado la atención y el escrutinio que recibes comparado con la temporada pasada?
No mucho. Creo que es igual. Cuando estás en el mercado de radio y televisión más grande del país, vives bajo la lupa. Debes asumir la responsabilidad y obrar en consecuencia, y es lo que intento hacer.
¿Cuán inquieto está el equipo?
La semana pasó volando. Ya es viernes. Estamos listos para despegar e irnos. Será un enorme desafío para nosotros. Estamos entusiasmados. He podido dormir bien. Creo que todos han dormido bien. Estamos vigorizados, los entrenamientos han sido competitivos y fue una buena semana. Es cuestión ahora de jugar bien en todos los aspectos y tener fe en el plan de juego.
¿Cuál es la diferencia entre la final de conferencia de este año con la del año pasado?
Comprendemos qué está en juego y cuán cerca estuvimos el año pasado. No hemos tenido complicaciones con la preparación este año y todo se siente perfecto. El año pasado, no puedo decirte exactamente qué, pero todo sucedió a un ritmo vertiginoso y sencillamente intentaba aguantar lo mejor posible. Siento que este año tengo mayor comprensión de las cosas y un poco más de confianza. El tipo de confianza que necesito. Que viene tras un año entero de preparación y de tener fe en los entrenadores y los jugadores en tu entorno. Creo que tenemos un gran plan de juego. Tendremos que dar nuestro mejor esfuerzo, así que será un buen reto. Estamos entusiasmados.
¿Cómo es que los jugadores que ficharon este verano han hecho una transición tan perfecta?
Creo que están aquí por una razón. Todos tienen actitudes muy buenas, y estamos exactamente donde queremos estar. Es aquí donde casi hemos llegado a un entendimiento. Claramente hemos armado este equipo por una razón. Esperamos que los muchachos se lleven bien, y han hecho más que eso. Mantienen relaciones estrechas y quieren ayudar. Han ofrecido consejos sabios, fruto de su experiencia. Gente como LT [LaDainian Tomlinson] y Jason Taylor se han incorporado al equipo y jugado muy bien. También [Antonio] Cromartie. Y se han portado bien.
Brodney Pool, alguien que quizá no tiene tanto reconocimiento, pero que juega un enorme papel en nuestra defensa, ha hecho un gran trabajo y ha sido el compañero de equipo ideal, ayudando a los demás, hablando con gente, haciendo preguntas, pasando tiempo con los jugadores fuera del centro de entrenamientos. Hemos construido este equipo. Más que ser un grupo de grandes jugadores, es uno de grandes personas. Entonces tienes a Rex, por ser quien es, acepta a todos como son y deja que expresen sus personalidades. Ha sido algo tremendo ser parte de este equipo. Si ganamos un par de partidos más, será uno que recordaremos para siempre.
¿Cuánto más complicada es la defensa de Pittsburgh comparada con la de New England?
Son defensas distintas. Sus primeros siete [la línea defensiva y el cuadro de apoyadores] son muy dominantes, defensas que cambian de posición constantemente y siempre te dan un look distinto. Dejan que Troy [Polamalu] haga lo que crea mejor y el 99 por ciento de la veces acierta. Hace un gran trabajo de encontrar el balón, de entender lo que pasa, de leer los ojos del mariscal. Creo que es el factor X en la defensa. Es un grupo tan sólido, y cuando le sumas a Troy, aún mucho mejor. Es un grupo duro. Tendremos las manos llenas, y estamos entusiasmados.
Como ambos son de la Universidad de Southern California, ¿tienes alguna relación con Troy Polamalu?
Lo vi un par de veces en los partidos de primavera cuando estaba aún en la universidad. El entrenador [Pete] Carroll hablaba de él todo el tiempo. Tenían su foto en la pared en la sala principal del equipo. Una imagen enorme de Troy. Es uno de los grandes. Por lo que oyes, por lo que te dicen, es un gran competidor. Será divertido verlo. Entonces será manos a la obra en el campo de juego, y con suerte estaremos sonriendo después del partido e intercambiando palabras placenteras.
La frase "No puedo esperar", ¿describe al equipo?
Me dio gracia. Los muchachos han vacilado a Bart [Scott], pero siempre con buen humor. Estaba totalmente animado tras el partido. Así es él. Su personalidad. Si yo hubiese hecho una entrevista parecida, no sé si hubiese sido tan bien recibida. No soy así. Pero vimos perfectamente cómo es Bart. Cuán intenso es y cuán emocionado se pone cuando juega. Realmente vimos su emoción y su pasión. No creo que haya molestado a la gente, pero sí lo hemos fastidiado.
¿Cómo es que la filosofía de Ryan ayuda al equipo a prepararse para los partidos grandes?
Hace hincapié en la importancia del partido temprano en la semana, pero se asegura de que lo hagamos a nuestra manera, y de que la pasemos bien durante las preparaciones y de que nadie se ponga demasiado tenso. Hay cierta verdad en estar demasiado emocionado. En querer ser tan perfecto que no juegas como eres capaz.
Tampoco quieres estar demasiado suelto, así que nos mantiene centrados. La noche antes del partido nos enfoca perfectamente y nos habla de algo que siente en su alma, ya sea traer a alguien como Dennis Byrd, hablar del equipo, tener a otros de los muchachos hablar en las reuniones. Siempre sabe como cambiar las cosas en el momento justo y eliminar la monotonía de una larga temporada y dejar que nos expresemos el uno al otro. Hace un gran trabajo preparándonos para jugar en estos partidos grandes.
¿Cuánto te respetan los jugadores de mayor edad en el equipo?
Bueno, el año pasado bromeaban con eso. Era algo que decía T-Rich [Tony Richardson]. Este año respetan mi liderazgo porque vieron cuán duro trabajé la temporada pasada. No hablé tanto. Intenté cumplir con mi responsabilidades, y trabajar fuertemente y demostrar que me importaba el equipo, el club y que iba a competir no importa que sucediera.
Creo que una vez que se dieron cuenta de eso y vieron mi voluntad para trabajar y ayudarlos e intentar hacer las cosas bien, comenzaron a respetarme. Cuando tengo algo que decir, los muchachos prestan atención y comprenden que viene de mi alma. Que es algo que siento, algo auténtico y que quiero que todos haga caso. Así es como somos. Respetamos a todos dentro del vestuario. Cuando alguien tiene algo que decir, suele ser importante y queremos escuchar para asimilarlo y examinarlo y comprenderlo individualmente y usarlo para el bien del equipo.