Un día después de la masacre de Foxborough, los Jets intentaban reponerse mentalmente y físicamente, forzados por la semana corta de preparación a borrar lo más rápido posible la pesadilla y enfocarse en el partido del domingo en casa contra los Dolphins.
La debacle ante los Patriots en el estadio Gillette fue costosa a varios niveles. Además de perder por 45-3, la sexta peor derrota en la historia del club, los Jets perdieron a James Ihedigbo posiblemente por varias semanas. Un profundo suplente vital en los esquemas aéreos y estrella de los cuadros especiales, Ihedigbo sufrió lesiones del tobillo y del ligamento lateral interno de la rodilla defendiendo contra un pase en el tercer cuarto. Los Jets esperaban las imágenes por resonancia magnética antes de hacer un diagnóstico más preciso y un pronóstico de su recuperación.
La baja de Ihedigbo es casi tan severa como la del profundo titular Jim Leonard, que sufrió una fractura de la tibia derecha durante el entrenamiento del viernes. Ihedigbo, que mide 6 pies 1 pulgada y pesa 214 libras, suma tres capturas de mariscal y 22 paradas en los cuadros especiales, el segundo mayor número entre los Jets. En el 2009 fue el líder de los cuadros especiales con 26 paradas.
Las lesiones a Leonhard y Ihedigbo han obligado a los Jets a comenzar una búsqueda de emergencia por más profundos, y seguramente le costará el puesto en la plantilla a Laveranues Coles, el ala veterano de 11 campañas que fichó el viernes. Coles estuvo inactivo para el partido del lunes, pero su intención era volver a los Jets, su equipo original, antes de retirarse una vez por todas.
Un jugador que no va a ningún lado es Nick Folk, el especialista de goles de campo que pasa por un bache agudo. Falló malamente un gol de campo de 53 yardas en el primer cuarto contra los Pats y tras un magnífico comienzo de campaña, ha fallado en seis de los últimos 13 intentos. Para la temporada, ha conectado 23 de 32, apenas 72 por ciento, un promedio bajo para los pateadores estrellas. El técnico Rex Ryan desmintió cualquier especulación de un cambio de pateadores con una afirmación breve y contundente: "Es uno de los míos".
Lo peor de todo fue que la derrota no solo les costó a los Jets la punta de la división Este, sino también los bajó de primeros a quintos en la conferencia Americana en una posición vulnerable cuando quedan cuatro senas por jugar. Los Pats están primeros en la división y la conferencia con marca de 10-2, mientras que los Jets tiene un registro de 9-3, igual que los Steelers, uno de sus rivales en el último mes de la campaña. Los Jets ahora juegan para clasificarse como equipo comodín, lo que los obligaría a celebrar tres partidos de postemporada para llegar al Súper Bowl.
"Todo lo que hemos hablado sigue siendo alcanzable. Nos queda todavía una cuarta parte de nuestro calendario. No hay razón por la cual marcar el botón del pánico", dijo Ryan. "¿Jugamos terriblemente mal? Absolutamente. Fue el peor rendimiento de todos los equipos con los que he estado asociado. ¿Fue el rendimiento más malo que he visto. Sí, lo fue. Hay que darle mérito al rival. Salieron al campo y se lo ganaron. Hicieron todo bien. Todo".
El lunes después del partido Ryan calificó la derrota como: "La paliza más grande que he sufrido como entrenador, en mi carrera". Los Patriots, dirigidos por un Tom Brady que estaba al rojo vivo, se llevaron el primer cuarto por 17-0 y la primera mitad por 24-3. Brady y los Patriots dieron cátedra del juego aéreo corto y preciso, completando 21 de 29 lanzamientos a ocho receptores distintos para 326 yardas y cuatro touchdowns, todos a jugadores diferentes.
Sí, los Jets jugaron mal en todos los aspectos del juego, pero hasta Mark Sánchez, el mariscal de los Jets, reconoció que cayeron vencidos a manos de un jugador ilustre que celebró uno de los mejores partidos de su vida. Dos de los tiros anotadores fueron resultado de jugadas que cambió en la línea de ataque cuando anticipó las cargas de los Jets.
¿Cuán bueno ha sido Brady en semanas recientes? ¿En esta temporada? Ha sumado más de 300 yardas en tres de los cuatros últimos partidos y ha superado las 3,000 en una campaña por octava vez en su carrera. Ha lanzando cuatro touchdowns en encuentros consecutivos, contra los Lions y los Jets. Encabeza la Liga con 27 tiros anotadores y un índice de mariscal de 109.5. Los más increíble de todo ha sido su precisión. Lleva siete partidos y 228 lanzamientos seguidos sin un corte de balón, ambas rachas récords del club.
Y si no fuera suficiente, batió la marca de la NFL, que compartía con Brett Favre, de victorias consecutivas en casa. Brady ahora ha ganado 26 al hilo en el estadio Gillette.
"No podíamos hacer nada", afirmó Eric Smith, quien sustituyó a Leonhard en el cuadro secundario. "Nuestra defensa no podía detenerlos. Cada vez que tenía un tercero y largo, levantaban su nivel y completaban jugadas grandes. No ejecutamos bien, no derribamos a nadie bien. No hicimos nada bien".
Sánchez, quien jugó mal el año pasado en su primera visita a Foxborough, claramente estuvo afectado por el viento y las temperaturas bajo cero. A consecuencia, vivió su peor partido del año, muy parecido a la pesadilla del 2009 en el estadio Gillette, cuando lanzó cuatro tiros interceptados y perdió un balón. Esta vez completó 17 de 33 lanzamientos para 164 yardas y tres tiros interceptados, todos en la segunda mitad.
Fue la peor paliza que los Jets sufren desde el 2006, cuando perdieron por 41-0 en Jacksonville.
"Fue una paliza a la antigua", dijo Sánchez. "No hay manera de disimularlo. Tengo que jugar mejor. Especialmente en la recta final del partido, cuando me corresponde tomar mejores decisiones. Cuando enfrentas un ataque tan explosivo como ése, no les puedes regalar nada. Fue lo que hicimos, y pagamos caro por ello".
"Fue un puñetazo en el vientre", dijo el apoyador Bart Scott. "En la televisión nacional, ante una audiencia mundial, y no mostramos quiénes somos. No jugamos como los verdaderos New York Jets. No nos estamos estremeciendo. Es cuestión de manos a la obra".
Notas del partido
Brady fue el primer mariscal rival con cuatro tiros anotadores desde que Jeff Hostetler de los Raiders marcó cuatro en 1995… Los Pats no cometieron errores de balón por el cuarto partido seguido, igualando el récord de Liga que los Jets empataron a inicios de la temporada.
Girando como un trompo en la primera serie ofensiva de los Jets en el tercer cuarto, Tomlinson marcó cuatro yardas para superar a Eric Dickerson por el sexto lugar en la lista de todos los tiempos de yardas por tierra. Tomlinson, que está en su 10.ª campaña, ahora suma 13,278 yardas… Danny Woodhead, ex jugador de los Jets, se desquitó con el club que lo dejó libre a inicios de la campaña. Marcó 115 yardas al ataque, con dos acarreos para 11 yardas y cuatro recepciones para 104 yardas, incluso un tiro de palanca que sumó 50 yardas.